domingo, 4 de marzo de 2018

PERÚ: POLÍTICA Y REVOLUCIÓN SOCIALISTA

PERÚ: POLÍTICA Y REVOLUCIÓN SOCIALISTA
Año 14 – Nº 197           Arequipa, 2018, marzo 3.        http://candela3.blogspot.com
Por: Arturo Muñoz                                                                         candela369@gmail.com


 “La política es la consagración del oportunismo de los que tienen medios y recursos”
Una organización de izquierda con un candidato de izquierda que convoque a la organización del pueblo, como lo hace Petro en Colombia, con un discurso anti establishment
Las imágenes de Velasco, de Túpac Amaru, de Mariátegui, están arraigadas en el gen social del pueblo peruano

A simple vista en las primeras décadas de cada siglo en América Latina se producen grandes cambios, por lo menos, en el siglo XIX tuvimos las revoluciones independentistas del imperio  español, luego en el siglo XX observamos el cambio del dominio del imperio inglés por el emergente imperialismo estadounidense, en nuestro siglo XXI la Revolución Bolivariana en Venezuela y la transformación en el marco del Estado Plurinacional de Bolivia son los signos de los grandes cambios a producirse en el transcurso de esta centuria.
Latinoamérica entró a este milenio pisando fuerte, los pueblos eligieron a gobiernos revolucionarios y progresistas. En Venezuela ganó el MVR (Movimiento V República, presidido por Hugo Chávez), Luis Ignacio “Lula” Da Silva, líder del Partido de los Trabajadores, asumió la presidencia de Brasil el 2003; el mismo año 2003 asume la presidencia de Argentina el peronista Néstor Kichner, a la cabeza del Frente para la Victoria; Tabaré Vásquez del Frente Amplio es elegido presidente de Uruguay el 2004; Evo Morales se convierte en el primer presidente indígena de Bolivia el 2006, militando en el Movimiento Al Socialismo (MAS); liderando el Partido Liberal obtiene la presidencia de Honduras Manuel Zelaya el 2006; al mismo tiempo Rafael Correa con Avanza País gana las elecciones presidenciales el 2006 en Ecuador; ya el 2008 también en Paraguay gana por segunda vez la presidencia la izquierda con Fernando Lugo, de la lianza Patriótica para el Cambio.
Mauricio Funes conquista la presidencia de El Salvador el 2009, dirigiendo el Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional; con Daniel Ortega el Frente Sandinista de Liberación Nacional gana las elecciones presidenciales de Nicaragua el 2006; Leonel Fernández del Partido de la Liberación Dominicana, de la misma ideología del FSLN, triunfa electoralmente como presidente en República Dominicana el 2008.

Estados Unidos pierde el control de América Latina y fracasa su intento de imponer el tratado de libre comercio llamado ALCA. Y la Revolución Cubana recibe el respaldo sólido de los gobiernos y pueblos latinoamericanos.

Un factor clave para la aparición de gobiernos progresistas y revolucionarios en América Latina es el surgimiento de China como una gran potencia comercial, pues para muchos países es el principal socio comercial y estos gobiernos deben flexibilizar sus políticas internas con respecto a las organizaciones de izquierda.

Otro factor es la crisis económica que azota al subcontinente latinoamericano a causa de la implantación por las dictaduras del capitalismo neoliberal. La desocupación, la inflación desbocada, la deuda externa impagable son algunos de los síntomas de esta crisis.

Aunque la corrupción es una característica intrínseca del capitalismo, y los casos de Color de Melo, de Carlos Menem, de Augusto Pinochet, de Alan García, de Alberto Fujimori, de Gonzalo Sánchez de Lozada, de Peña Nieto y sus antecesores, llenaron las primeras páginas en sus países, trayendo como consecuencia el desprestigio de la política; es con el caso Odebrecht que la corrupción se pone en el centro de la atención del pueblo sumergiendo a todo el sistema capitalista en una crisis de la cual sólo lo podrá salvar el fascismo redivivo y la miopía pusilánime de las organizaciones de izquierda.

Perú es el país con la corrupción más generalizada y profunda en las clases sociales, es parte de la mentalidad del pueblo peruano, permisible sea por comisión o por omisión. Perú se asemeja a la Cuba de Batista. Y el remedio será el mismo. Cuando se lee la frase de Fidel la política es la consagración del oportunismo de los que tienen medios y recursos”, calza perfectamente para describir la política peruana. Y es que el caso Odebrecht puso al desnudo la corrupción de la burocracia del Estado burgués y de la propia burguesía, la corrupción sistemática de las empresas para enriquecerse.

Las próximas elecciones regionales y municipales serán la confirmación ratificada, revalidada, certificada y reafirmada que los políticos postulan a los cargos de gobernadores y alcaldes para robar los impuestos cobrados inmisericordemente por la SUNAT al pueblo. Qué peruana o peruano duda de que esto sea así… ¡Ninguna, ni Ninguno! Al pueblo se le terminó de caer la venda de los ojos con Fujimori y Montesinos, y por más que Alan García jure y perjure su inocencia ¡Nadie le cree!...
Si aún no hay una reacción radical es por la traición de Toledo el 2001 y la gran traición de Humala el 2011, y ya es vox populi que Antauro Humala es igual a su hermano, ya que todo nacionalista es fascista, todo fascista es capitalista y el capitalismo es por esencia corrupto. Entonces falta no un líder, sino una organización, un movimiento, un frente, un partido, que unifique al pueblo desconfiado. Un movimiento, frente o partido consecuente, que haga lo que dice, fiel y leal al pueblo, que se enfrente con valentía a los capitalistas y al imperialismo.


De las elecciones regionales y municipales el Perú saldrá más fragmentado. En octubre de este año 2018, el Perú habrá llegado al inefable centro de su historia republicana, al decir de Borges. La renuncia de PPK, incluidos sus vicepresidentes y la convocatoria a nuevas elecciones no es la solución a la crisis sistémica del capitalismo neoliberal peruano. Porque la crisis no tiene salida en la democracia representativa, pues los representantes, los políticos son sinónimo de corrupción. La política es sinónimo de corrupción. Y como en Cuba la alternativa a impulsar con todas las fuerzas, cueste lo cueste es la revolución. La letra de la canción de Carlos Puebla Y en eso llegó Fidel, expresa con claridad la única alternativa popular:
Aquí pensaban seguir
jugando a la democracia
y el pueblo que en su desgracia
se acabara de morir

Y seguir de modo cruel
sin cuidarse ni la forma
con el robo como norma...
y en eso llegó Fidel

Se acabó la diversión,
llegó el Comandante
y mandó a parar

Un rezago de la posibilidad de cambiar la sociedad por la vía de la democracia burguesa es la cantaleta de nueva constitución; como si el imperialismo, los capitalistas, la oligarquía financiera – minera van a permitir el triunfo electoral de los candidatos de izquierda, por muy domesticados que estén.
El imperialismo intentará aplicar sus recetas conocidas: golpe de estado fascista (militar-policial), fraudes electorales, permitir la delincuencia masivamente para atemorizar a la población, generar el crecimiento de la inflación para ahogar económicamente a la población, endeudar el país para incrementar los impuestos y aumentar las utilidades de las transnacionales, finalmente, aplicará la receta de la invasión militar directa como en Libia, Irak, Siria. El imperialismo es totalmente previsible. La izquierda peruana es igual de previsible, al punto que en Arequipa no habrá una organización de izquierda con un candidato de izquierda que convoque a la organización del pueblo, como lo hace Petro en Colombia, con un discurso anti establishment. La variable imprevisible es el mismo pueblo peruano. Las imágenes de Velasco, de Túpac Amaru, de Mariátegui, están arraigadas en su gen social.