Año 12
– Nº 177 Arequipa, 2016, abril
1. http://candela3.blogspot.com
Por:
Arturo Muñoz
Candela369@gmail.com
CONCENTRAR LOS VOTOS EN EL FRENTE AMPLIO
(lograr obtener una buena votación presidencial y una buena
bancada en el Congreso)
Ad portas de la celebración
de los 100 años de la Revolución de Octubre de 1917, que abrió la historia a
una sociedad sin clases, sin explotados ni explotadores, el más grande
acontecimiento social y humano de los últimos siglos; en el Perú estamos en una lucha muy
pequeña comparada con esta heroica acción revolucionaria del proletariado ruso: las elecciones
del 10 abril, en la cual el pueblo peruano se presenta cada vez con una
posición más nítida luego de la derrota del 5 abril de 1992, día del autogolpe
de Alberto Fujimori, implantando la mafiosa dictadura cívico militar
fujimontesinista, que cerró el periodo más cruel y sanguinario de la
vida republicana burguesa de 1980 al 2000, con el saldo de más de 70 mil
peruanas y peruanos asesinados, más de 300 mil mujeres esterilizadas violentamente
contra su voluntad. Si alguien duda del porqué del rechazo popular a las
candidaturas de Keiko Fujimori, de Alan García, de Alfredo Barnechea; allí están
los millones de víctimas de los 20 años de represión indiscriminada silenciados
en los medios de comunicación, cuyo sufrimiento nunca ha sido tomado en cuenta
por las clases dominantes y opresoras.
Acción Popular, la Apra – PPC y el fujimontesinismo van a rendir cuentas
no en este proceso electoral únicamente, el juicio por sus crímenes y por haber
traicionado a la Patria regalando las enormes riquezas peruanas condenando al
pueblo a vivir en la miseria, aún está por realizarse en un futuro cada vez más
cercano. Pero
estos grupúsculos, estas empresas electorales (AP, Apra – PPC y el
fujimontesinismo) son las máscaras detrás de las cuales se ocultan la burguesía
financiera y minera, las transnacionales ladronas de los recursos naturales, la
oligarquía financiera internacional. Sus
eternos acompañantes las iglesias y sectas religiosas copadas por el Opus Dei,
los sodalicios, los catecúmenos con prácticas conservadoras y delincuenciales
ligadas a la pederastia, al abuso de niños. Y el principal instrumento de
dominación el Estado, la burocracia estatal, y los destacamentos armados
militar y policial protegidos por la ley de impunidad para usar sus armas
contra el pueblo que con justicia reclama por sus derechos.
Marchamos a paso firme hacia la revolución social para hacer justicia al
pueblo por siglos explotado por los capitalistas, para construir la sociedad socialista;
un
pequeñísimo paso en esa dirección ha sido la conformación de tres listas de
izquierda cuando el imperialismo pensaba que había sometido indefinidamente al
pueblo peruano. En el corto tiempo
de dos meses una de ellas despuntó, la del Frente Amplio, las otras dos por diversos motivos no lograron crecer
al mismo ritmo.
Los lapsos para las elecciones en el Perú son sumamente pequeños, así la
burguesía impide un debate esclarecedor que eleve el grado de consciencia de la
población sobre cuáles son las mejores soluciones a los problemas sociales,
cuál es el mejor modelo de sociedad a construir para el desarrollo de la
humanidad.
A empujones han querido
obligar a la población a elegir entre tres opciones altamente venenosas para el
Perú: Fuerza Popular (fujimontesinismo), Alianza Popular (Apra – PPC) y la
variante PPK. A diez días de las
elecciones las opciones reales son Fuerza Popular, PPK y sorpresivamente el
Frente Amplio. Este
frente no es una opción socialista, pero lo integran socialistas; es más bien
una opción liberal radical. Pero aun así es más propia y cercana al movimiento
social popular en lucha contra el saqueo imperialista y la explotación
capitalista, que lo que fue finalmente el desenmascarado nacionalismo
neoliberal humalista del 2011. El frente no es aún ni siquiera el embrión del partido
revolucionario, es lo que las condiciones han permitido construir y presentar
en estas elecciones, responde al grado de desarrollo de las contradicciones entre
capitalistas y trabajadores y al nivel de consciencia y organización del pueblo
peruano.
Sin caer en el reformismo de la izquierda chilena que plantea el Realismo
sin Renuncia, de postrarse ante el dominio de la burguesía, permitiendo la
continuación del saqueo imperialista, aplicando los planes de división de
América Latina participando
en el plan político militar Alianza del Pacífico; provocando la
crítica desde la izquierda al gobierno de la Nueva Mayoría y la conformación de
organizaciones más radicales a la tradicional izquierda chilena; ni en la falta
de decisión del PSUV de ejercer la dictadura de los trabajadores en contra de
los dueños de los medios de producción que boicotean la economía venezolana;
la izquierda
peruana debe tomar el camino de construir un verdadero partido revolucionario
con una total rigidez en los principios y una total flexibilidad en la táctica,
enseñanza histórica del leninismo.
Reconociendo el hecho de la enorme debilidad de la izquierda peruana en
todos los campos y en contrario la fortaleza del movimiento popular peruano, la clave en estas
elecciones está en concentrar el voto en la candidatura presidencial del Frente
Amplio, pues si llega a disputarse la presidencia en segunda
vuelta con el fujimorismo, en vez de ser un triunfo de la ultraderecha fascista
se convertiría en un triunfo pírrico, en una derrota práctica del fascismo. Y obligaría
a la definición de una parte de la derecha neoliberal a optar en favor de una
propuesta liberal radical progresista como la representada por Verónika
Mendoza.
Con igual prioridad debe
trabajarse por la concentración del voto en torno a las listas congresales, construyendo
un dique congresal mucho más sólido en comparación con el que contamos a partir
del 2011. De allí que la burguesía en su
desesperación incentive el voto nulo o blanco y muchos caigan en esta táctica
burguesa, utilizando a los ultraizquierdistas y los infiltrados en el
movimiento popular para propagarlo, y así disminuir la votación al Frente
Amplio.
A pesar de las condiciones
internacionales adversas, con la feroz ofensiva imperialista en contra de los
gobiernos progresistas en Venezuela, Bolivia, Ecuador y Brasil; con la
reactivación del Plan Cóndor; la derrota sufrida en Argentina; el intento de
hacer fracasar el Plan de Paz en Colombia; la crisis económica y ambiental; pero aprendiendo de la resistencia palestina, del pueblo
sirio, que no han permitido el triunfo de los imperialismos estadounidenses y
europeos, ni del sionismo israelí, la izquierda peruana debe luchar por un Gobierno Democrático y Patriótico que de inmediato realice las siguientes tareas:
Exigir la más amplia
democracia burguesa:
- Eliminación de los decretos de impunidad a las fuerzas armadas para
asesinar al pueblo que se moviliza y protesta.
- Eliminación de la Ley de Organizaciones Políticas al exigir un acta de
sujeción al actual sistema democrático burgués en crisis, cuestionado por la
mayoría de peruanos por ser altamente corrupto (Ley 30414, art. 5, inc. a).
- Luchar por la vigencia del derecho a la movilización, a la protesta y a
la libertad de expresión.
- Detener la persecución política a los dirigentes defensores de los
intereses del pueblo. Libertad para el dirigente político popular Gregorio
Santos, que se le dé el mismo trato que a los acusados de la burguesía. Alto a la persecución política a Guillermo Bermejo Rojas, dirigente nacional de la organización política Pueblo Unido.
- Exigir el inmediato levantamiento de la militarización de las zonas en
conflicto. No al uso de las fuerzas armadas para el combate a la delincuencia, por
ser en la práctica la justificación para dirigir los fusiles en contra del
pueblo.
- No a la criminalización de las protestas populares. Todo dirigente
popular está siendo enjuiciado por diversos motivos para anularlo en la lucha
por los derechos del pueblo.
- No a la judicialización dela política. Todo dirigente popular que
ingresa a activar políticamente es enjuiciado para quitarle sus derechos
ciudadanos.
Cambio del modelo
neoliberal:
- Fin a las AFP. Por un verdadero sistema democrático de pensiones. Las AFP son
un sistema de inversión donde el trabajador pierde su dinero.
- Fin a la privatización de la salud y la educación. Por servicios de
salud y educación públicos, de calidad y gratuitos.
- Control de las ganancias de las empresas. Rebaja del precio de la
gasolina.
- Por el derecho a la propiedad del suelo, del subsuelo y de los
productos encontrados en ellos por parte de la Nación, representada por el
estado. Anulación de los contratos con las empresas petroleras, de gas que no
estén adecuados a este principio básico de soberanía nacional.
- Impulso a la industria nacional resguardando el ambiente. El proceso de
industrialización no debe ser el mismo de los países capitalistas avanzados (EE.
UU., UE. China) que han destruido el ambiente, afectando la salud de su
población y de toda la humanidad.
- No a la minería como eje del desarrollo nacional. Los pasivos ambientales
son enormes y los beneficios para las peruanas y peruanos ha sido menos cero,
se han incrementado las enfermedades a causa de la actividad minera.
- No al TPP. No a los TLC.
No hay comentarios:
Publicar un comentario