sábado, 3 de septiembre de 2011

PERÚ ELECTORAL AL BORDE DEL DESASTRE ECONÓMICO

candela


Año 7 Nº 78

Arequipa, 2011, abril 06.

ASOCIACIÓN JUAN PABLO VIZCARDO Y GUZMÁN

En camino al Bicentenario de la Primera Independencia del Perú

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PERÚ ELECTORAL AL BORDE DEL DESASTRE ECONÓMICO



Por: Arturo Muñoz



Estoy bien Ma...¡SÓLO ESTOY SANGRANDO!



Entre un optimismo absurdo mostrado por los candidatos a la presidencia, fomentado por los dudosos datos de la dictadura aprista, y la realidad descarnada entrando en crisis de la economía peruana pintada en la reducción del impuesto general a las ventas en 1 punto, reduciendo el presupuesto en 3 mil millones de soles; el DS 012 dado por el MEF para recortar otro 8% el gasto público, alrededor de 10 mil millones de soles; el desfinanciado fondo de estabilización de los precios de los hidrocarburos; el irrisorio fondo de 5 500 millones de soles para la transición gubernamental. Medidas adoptadas disque para frenar la inflación importada.



El proceso electoral continúa como si la economía peruana estuviese viento en popa. Y los programas se basan en este supuesto falso. El Perú en breve será víctima de un terremoto financiero, de un tsunami tan destructivo de los proyectos en marcha, de una parada en seco de las inversiones de los capitalistas transnacionales en rubros no extractivos, y de los efectos radiactivos de la disminución abrupta de los precios de las materias primas con excepción del oro y el incremento de las importaciones producto de la ausencia de una industria nacional, de una agroindustria garante de la seguridad alimentaria y de la dedicación de 2 tercios de la población a las actividades comerciales y de servicios de bajísima tecnológica.



Sí, el Perú esta bien pues sólo se esta desangrando, síntoma de una várices ocultada por la dictadura corrupta aprista a punto de explotar en una hemorragia imparable y sin la precaución de haber hecho el ahorro interno para inyectar nueva sangre a la economía. Ahorro que debió ser obtenido del impuesto a las sobreganancias mineras, a la venta al consorcio Camisea del gas al precio internacional, al cobro de los impuestos de las corporaciones transnacionales deudoras de 14 mil millones de soles a la Sunat, la más significativa la impresentable Telefónica.



Ya el Perú con la corrupción aprista desperdicio la oportunidad de construir un país con bienestar para todos. El próximo gobierno aparecerá como el causante del desastre económico, y quien mejor para echarle el pato que a Ollanta ligado a Lula, líder brasileño del cual en muchas oportunidades los estadounidenses quisieron deshacerse y al cual la neoligarquía peruana miró con temor y odio.



Debe quedar claro, en los 5 años de la dictadura aprista vivimos el boom económico, pero los faenones apristas y la insaciable voracidad de las transnacionales acabaron con la posibilidad peruana y en el futuro cercano con la esperanza de los pobres, ilusionados en el chorreo del modelo neoliberal. Pues el boom llegó a su fin, la crisis mundial desembarcó en el Perú hace meses y los corruptos apristas no prepararon al país para enfrentarla.



Alan García después del último debate entre los 5 candidatos con mayor opción agradeció sarcasticamente a ellos haberle reconocido el incremento de las inversiones privadas. Ninguno critico el pésimo manejo económico, el incremento de las desigualdades, el regalo de los recursos naturales, con la salvedad de Ollanta al señalar la corrupción de la alianza fujimontesinista - aprista. Previniendo una respuesta a estos custionamientos en una posible campaña electoral el 2016, negoció de mala manera el retorno de las piezas de Machu Picchu con la Universidad de Yale, pues las más valiosas no han sido devueltas. Pero esta acción le permitirá aparecer como un defensor de los tesoros nacionales. García no da puntada sin hilo.



Las aves de rapiña vuelan sobre la sangrante economía peruana



Un pensamiento errado es: el infortunio del Japón es la fortuna del Perú ¿Porqué es incorrecto? Las convulsiones sociales, políticas en los países árabes y del norte de África y la guerra de agresión contra Libia por parte de la Otan, obedecen a una razón dentro de las muchas válidas, las reservas de petróleo están en sus territorios y Estados Unidos y Europa no desean seguir pagando precios elevados por éste, ni estar sujetos a las decisiones de la OPEP. Angustiosamente para frenar un poco la caída en picada de sus economías deben conseguir a mínimos precios el petróleo, y, por extensión, cualquier recurso natural de cualquier país; y si la guerra es la vía...mejor para ellos, pues ganarán a dos cachetes: comprando los recursos naturales a precios insignificantes y vendiendo armas a las dos facciones en lucha, sin importar los daños colaterales, los millones de víctimas. Sumando las víctimas de Irak, Afganistan, Libia, Costa de Marfíl entre los más recientes van varios millones a la cuenta de los países del capitalismo central.



Entonces es falso lo dicho por los capitalistas en Perú de la llegada de inversiones extranjeras producto del desastre japonés para extraer las materias primas para su reconstrucción con la buena voluntad de pagar por ellas su valor. Si no lo hacen ahora menos lo harán cuando el dinero no les sobra. Keiko en especial es la ilusión japonesa de extraer los productos peruanos sin costo alguno, basta recordar la renegociación fujimontesinista de la deuda por el oleoducto que subió de 70 millones de dólares a 1 500 millones de dólares a favor de la empresa japonesa, la cual cobra al Perú por el paso del petróleo de la selva a la costa. Igualmente PPK ya lo viene haciendo desde la época de Belaunde en su primer periodo, artífice del regalo del petróleo a la IPC, perseguido por el general Velasco y fugado al Ecuador en la cajuela de un auto, y el 2004 entregó el gas de Camisea a su compatriota Bush casi gratis, propietario de la Hunt Oil parte del Consorcio. Crimen perpetrado en complicidad con Alejandro Toledo, banda a la que se integró Alan García, presidente del gobierno tan corrupto o más que el de la mafia fujimontesinista, el aprista.



Cientos de aventureros capitalistas esperan el resultado de las elecciones del 10 de abril para enriquecerse sin invertir un dólar partido en dos, con las facilidades prometidas por Keiko, PPK, Toledo y Castañeda a semejanza del alanismo. Las aves de rapiña, las empresas capitalistas, huelen la sangre desde la altura y sólo esperan el momento propicio para bajar sobre su presa, desollarla y comersela.



Estos capitalistas son como la Southern cuyo Estudio de Impacto Ambiental ha sido cuestionado por la UNOPS, y con apoyo de la APRA y los candidatos de derecha han enviado miles de policías y al ejército para reprimir al heróico pueblo del Valle de Tambo, que no quiere con pruebas irrefutables la explotación minera porque desaparecería el valle. Si gana un candidato de derecha las corporaciones mineras actuarían con total impunidad.



Una segunda vuelta de definiciones entre Ollanta y Toledo



Ya no hay duda, la derecha y no el pueblo definen el otro candidato para la segunda vuelta. Y esta ha decidido por Toledo. Los argumentos van desde la identidad étnica: dos nativos enfrentándose. Los españoles utilizaron a Mateo Pumacahua para vencer a Tupac Amaru. Por otro lado PPK, es el virrey del Imperio estadounidense y sería fácil organizar una oposición en su contra, más cuando el Perú está entrando en crisis; sólo si consigue el apoyo del movimiento fascista Tea Party de Sarah Palin podría pasar a la segunda vuelta. En tercer lugar sería absurdo creer en un Estados Unidos cediendo el Perú a Japón y China, para ello pondrán una tranquera a Keiko. Castañeda esta fuera de juego.



En la segunda vuelta las verdades no dichas en la primera serán el plato principal del menú. En especial el desastre económico al cual camina ineludiblemente el Perú por la ineficiencia y la corrupción aprista. Y allí los programas tendrán que sincerarse. La ilusión del boom económico se evaporará.



Próximo gobierno sin margen de maniobra



García sabe de la crisis incubada en su gobierno. De su traición al Perú al no tomar las medidas para retener una buena parte de las ganancias transferidas a los paraisos fiscales por las transnacionales. El crecimieto exponencial de las importaciones va a dejar sin ahorro nacional al Perú. El próximo gobierno no podrá satisfacer las demandas de la población, el costo de vida crecerá amenazando con una nueva hiperinflación.



Si gana Toledo el 20% de la población mantendrá un nivel aceptable de vida, el 80% pasará a ser pobre o pobre extremo. Toledo es la esperanza de las transnacionales. Pues los salarios serán africanos y las conquistas laborales desaparecerán.



Gana Perú de Ollanta Humala ha elaborado un programa, que ajustándolo a la realidad de un país en crisis, permitirá a los más pobres tener tablas de las cuales agarrarse para no hundirse.



El pobre debe cargar con dos cruces: con la cruz de su existencia en la miseria y la conciencia de que esta durará un buen tiempo más. Y con el estandarte de cambiar la sociedad individualista - capitalista por un sociedad colectivista. Un largo y duro trabajo le espera a la izquierda consecuente, formar la conciencia del pueblo, construir una organización revolucionaria, recoger en un programa las experiencias de la humanidad hacia una sociedad colectiva y elaborar una nueva ideología acorde con las nuevas condiciones. La crisis de la izquierda es profunda en lo orgánico, en lo programático y en lo ideológico, salir de ella costará unas décadas más, poco tiempo en opinión de Goethe quien pedía a los políticos un horizonte de tres mil años.



Sin embargo, la nueva mayoría patriótica, democrática, descentralista y honesta se consolida con cada acción de lucha de las masas y con la definición mayor de las organizaciones políticas que buscan representarla.

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