domingo, 30 de agosto de 2009

ASAMBLEA CONSTITUYENTE

candela noticias AQP
Año 3 Nº 19
Arequipa, 2007, julio 23.


ASAMBLEA CONSTITUYENTE

Arturo Muñoz

Unos 10 millones de peruanos están comprometidos en los paros y huelgas regionales y sectoriales, que remecieron al gobierno aprista a pocas semanas de cumplir su primer año de mandato. Doce regiones del sur y el oriente protestaron con o sin el apoyo de sus gobiernos regionales. Tres gremios nacionales, mineros, trabajadores del sector educación y maestros, entraron en huelga indefinida. La Central General de Trabajadores del Perú – CGTP – realizó una exitosa jornada de lucha nacional el 11 y 12 de julio.

El común denominador de las protestas ha sido el cambio de la política neoliberal, solicitud presentada por primera vez en el paro departamental de Lima el 29 de diciembre de 1975, después de aplicado el primer programa de ajuste estructural por parte de la dictadura militar del general Francisco Morales Bermúdez. En pocos países el neoliberalismo fue sustituido por modelos radicalmente diferentes en América Latina: Venezuela, Bolivia y Ecuador.

García prometió el cambio responsable del modelo neoliberal, el incumplimiento de la promesa lo ha puesto en cola para ser beneficiado como muchos presidentes latinoamericanos que persistieron en continuar con el neoliberalismo. Su exigida renuncia parece ser cuestión de tiempo, salvo por el golpe de timón con dirección al fascismo que ha dado en los últimos días, que será el eje de su discurso el 28 de julio.

Aunque en el Perú los discursos presidenciales de 28 de julio son poco importantes, mas son una formalidad, los anuncios son efectistas antes que efectivos. Con el agravante de que García al igual que el dictador español Francisco Franco, asiste a tantas inauguraciones, a presentaciones televisivas, a premiaciones, reuniones de cualquier tipo, que la pregunta cae por lógica: ¿En qué momento gobierna?. La misma pregunta es válida para el asistente Jorge del Castillo, en el cargo de Primer Ministro, dedicado a viajar por el país a mecer a los protestantes, porque no lleva soluciones sino arroja el conflicto para más adelante. Las mesas de trabajo acaban en la frustración de los demandantes, al ser atendidas por funcionarios de muy bajo nivel jerárquico y sin capacidad de decisión.

Presentar un balance tiene como requisito haber tenido un programa de gobierno. El APRA asumió la conducción del gobierno sin programa y sin cuadros políticos y técnicos. Son jugadores que abusan de la gambeta, incapaces de meter gol. Así no se puede gobernar y la inestabilidad aumenta en proporción directa a los errores cometidos por el ejecutivo y el congreso.

La redistribución de la riqueza es un tema prohibido, lacrado con el acuerdo entre el ejecutivo y las empresas mineras en él que se sustituye el derecho del Estado a cobrar impuestos a las sobreganancias por el óbolo voluntario minero. La distribución de la riqueza en manos del Estado, más de 20 mil millones en reservas, denominada shock de inversiones es un fracaso burocrático y pronto será un asunto policial, por la corrupción que afecta crónicamente a los militantes apristas cuando asumen una responsabilidad estatal.

García por su primer periodo de gobierno entre 1985 y 1990 y el primer año de este segundo mandato, está calificado como el presidente más ineficiente de la historia del Perú. Ascendió a presidente con la acusación de fraude lanzada por Lourdes Flores, por lo que no es aplicable el dicho de que cada pueblo tiene el presidente que se merece. La legitimidad de su elección esta en entredicho. No hay indicio razonable para pensar que el segundo año será mejor que este pasado, todo lo contrario, es más probable que la amenaza de Agustín Mantilla se cumpla, que los apristas copen el Estado y la farra con el dinero de los peruanos sea tan grande como en los dos primeros años del primer gobierno de García.

La manipulación de las estadísticas, de los informes oficiales, de los indicadores económicos y sociales esta en marcha, la prueba es que sin mayor sustento anuncia el gobierno que la pobreza bajó en 10%, que no afecta al 54% de peruanos sino al 44%. Por ello el discurso será menos importante y más cuestionado, por el maquillaje de las cifras de este año que definitivamente da un balance en rojo.

¿Cómo explicar sin engañar la política apocalíptica de bóvedas llenas de oro y dinero del Banco Central de Reserva y millones de personas hambrientas en aldeas y ciudades?. No hay otra forma, más que echar mano de la práctica de los gobiernos autoritarios de destruir la información real, levantadas por los técnicos del INEI, e imprimir boletines con información irreal elaborada por técnicos apristas.

Diga lo que diga García el 28 de julio nadie va a creerle. La desconfianza alcanza al 76% de la población, según la encuesta de Conecta Asociados del 20 de julio, sólo un 24% aprueba la gestión aprista. La calle y el campo se han pronunciado con una firmeza impensable hace dos meses por la caída de García. El puñal de la renuncia clavado entre pecho y espalda lo lleva García, el desangramiento político es muy rápido. Aún los últimos manotazos fascistas lo acercarán más al término de su mandato, el fascismo necesita de nueva imagen en la presidencia, y de seguro Giampietri esta probándose el fajín presidencial.

Cambiar al Ministro de Economía, el neoliberal Luis Carranza, por un populista que permita el dispendio, es tan inútil como ponerse un curita cuando sangra la yugular. El Perú está en una encrucijada histórica: o cambia el modelo neoliberal o se reduce a su mínima expresión como país. El proceso de descentralización en estas condiciones fácilmente puede convertirse en un caos, con caudillos regionales que tratarán de alejarse lo más posible del centro y hacer lo que más les conviene. El Estado, las fuerzas armadas y los partidos sufren de centralismo, no están organizados nacionalmente y mucho menos tienen proyecto nacional, por ello no son los mecanismos para unir la diversidad de regiones.

Con el fracaso del APRA el regreso a la Constitución de 1979 tampoco es posible; si el APRA creador de esa Constitución no está dispuesto a restablecerla, menos lo hará el pueblo con ánimo antiaprista. Además el pacto social del 79 no contempló la crisis generada por el neoliberalismo, desde el punto de vista económico el país enfrenta más problemas que posibilidades con el control de los monopolios pinochetistas y las corporaciones transnacionales de todos los sectores. El Estado aparte de ser promotor, regulador y fiscalizador debe ser modificado como instrumento económico que pueda aplicar un plan nacional de desarrollo.

Para evitar el caos social y político al que conscientemente el APRA empuja al país, obedeciendo a intereses subalternos, el pueblo pide la renuncia de García, que traducida a exigencia política viable es la convocatoria a una Asamblea Constituyente. Priorizar la política sobre la economía y lo social permitirá encauzar las demandas económicas y sociales hacía objetivos nacionales claros.

El Anticomunismo y el antizquierdismo características del fascismo

Carente de soluciones a las demandas populares García con tono bufalesco acusó a los comunistas e izquierdistas de azuzar las manifestaciones contra su política económica. Salvo el magisterio las huelgas y paros son conducidas por dirigentes de todo pelaje político. García cree ver terroristas en cada uno de los manifestantes

Es que en Ayaviri la población le arrojo frutas y verduras, igual paso en otras localidades que visitó. García con el 76% de la población en contra reaccionó al desprecio masivo insultando a los maestros llamándolos comechados, ociosos; a los protestantes terroristas, comunistas, izquierdistas. Y en el colmo de la irracionalidad, de ingerencia extranjera en las movimientos sociales por parte de la ALBA, como si no existieran las instituciones culturales de Estados Unidos, de Japón que realizan las mismas acciones de bien social y de adoctrinamiento en la ideología liberal.

Sería una anécdota tal comportamiento del más incapaz de los presidentes de la historia peruana, si los partidos fascistas no hubieran utilizado estas acusaciones para eliminar físicamente a miles de dirigentes y simpatizantes de los partidos de oposición, de los gremios y organizaciones sociales. La ofensiva fascista iniciada por García obliga organizar la resistencia popular, para que el pueblo no sea pescado desprevenido como el pueblo boliviano por el narcotraficante García Meza.

Representación política del movimiento social

James Curtis Struble, embajador saliente de Estados Unidos en Perú, dijo que los partidos no aportan a la democracia peruana. Los partidos convertidos en bandas políticas organizadas para asaltar el tesoro público, en maquinarias electorales sin ideología ni programa, no representan a la población. El APRA es un espectro del cual sus propios militantes huyen espantados. Cuando llegó Jorge del Castillo a Arequipa pidió que prepararan una portátil de mil apristas, Vera Ballón recibió la bofetada cuando sus colaboradores le pidieron antes que nada cual era el puesto de trabajo que les iba a dar el partido para luego proteger al tontuelo de la película. Porque el APRA no necesita militantes pensantes como en la época auroral; García, destructor de la obra de Haya de la Torre, ha convertido al APRA en un manojo de matones.

Los apristas ideológicos saben que la parentela de los jerarcas, sin mayor sacrificio, está laborando en el Estado y que ellos no serán tomados en cuenta. Así que García, Del Castillo, Mulder, Cabanillas y en bajada no representan a nadie sino a si mismos y quizá a sus parientes. La hija de Cabanillas tuvo que renunciar a TV Perú luego del destape de su relación familiar.

En medio de las protestas los grupos de izquierda (Movimiento Nueva Izquierda – MNI Patria Roja -, Partido Comunista Peruano – PCP ex moscovita -, Partido Socialista, Comité Malpica, Partido Socialista Revolucionario – PSR -), y el Partido Nacionalista Peruano – PNP -, firmaron un comunicado conjunto donde le exigían al gobierno aprista un cambio de rumbo y de política…(lo instan) a cumplir sus compromisos, a abandonar la soberbia y la amenaza y a licenciar a este gabinete como un gesto de una posible rectificación…. Exigir cambios al APRA después de los once decretos leyes en los que se sanciona a las autoridades regionales y municipales por participar en manifestaciones de protesta es pedir peras al olmo. Lo que pudo haber sido una consigna política de las protestas sociales, la renuncia del gabinete, la plantean tímidamente, no como una consecuencia de las acciones de masa que exigen la convocatoria de un gabinete que responda a la demanda de cambio de modelo; sino como algo que se puede dar o no. El comunicado es una declamación de principios morales, de defensa derechos humanos en abstracto, sin propuesta política.

Siguiendo el ejemplo de los partidos de izquierda, los partidos de la derecha con excepción del APRA, firman otro comunicado en defensa de la democracia amenazada por las protestas sociales. Unidad Nacional, Acción Popular y otros grupos minúsculos se unen para en la práctica dar su respaldo al APRA ante la arremetida popular.

Ninguno de estos dos esfuerzos conjuntos afecta el estado de ánimo de las masas ni les llama la atención. Los partidos no sintonizan con la población, por ello ya casi el 99% no pertenece a un partido.

La afirmación de Curtis es peligrosa porque si los estadounidenses entienden la democracia como la alternancia de partidos en el gobierno, al no existir partidos en el Perú, que permitan canalizar las demandas sociales, la democracia no existe y Estados Unidos podría dar luz verde a una dictadura militar, apreciada forma de gobierno por los Estados Unidos para resguardar sus intereses. Aún más en una situación especial en que Venezuela, Cuba, Nicaragua y Bolivia comienzan a influenciar a las masas de desposeídos con la Alternativa Boliviariana para la Américas – ALBA -, con la Operación Milagro para atender a miles de pacientes con enfermedades en los ojos. La ALBA pone en dificultades a la diplomacia peruana, cuestiona la política de salud mercantilista. En el Perú obliga a reaccionar a las instituciones encargadas de atender las enfermedades de los ojos privadas y públicas, que sin convicción quieren emprender campañas gratuitas de atención a este grupo de enfermos que suman más de un millón, para evitar que sean atendidos por los médicos de la Operación Milagro.

Pero los pobres de Arequipa no son los únicos que van a atenderse por los médicos de la ALBA, también los de clase media e incluso la gente bonita, porque la atención es de alta calidad. Hay testimonios de personas que gastan S/. 400 soles sólo en transporte más los gastos de estadía para irse a operar gratuitamente a Copacabana, Bolivia. Los pobres cogen los omnibuses interprovinciales con un costo de S/. 50 soles. Algunos Antichavistas o anticubanos, después de ser curados, dan una vuelta de 360 grados y pasan a la defensa ciega de Chávez y de Cuba.

Si los partidos son instrumentos inútiles para dar la lucha ideológica, política y orgánica a la ALBA, entonces sólo queda el recurso de las armas. Curtis lanzó la amenaza que su sucesor en la embajada debe ejecutar.

Una tarea urgente es construir la representación política del movimiento social, que ha salido fortalecido de estas jornadas de defensa de la calidad de vida, de exigencia de rebaja de los impuestos, del cumplimiento de las promesas del presidente. Los gremios hacen caer presidentes como en Bolivia y Ecuador con huelgas y paros, pero es necesaria una organización política como el Movimiento al Socialismo para poner un presidente como Evo Morales.

La huelga indefinida en Arequipa

Alan García perdió en abril y junio del 2006 en Arequipa con menos del 10% de los votos, el APRA salió del Gobierno Regional y de los municipios en las elecciones de noviembre pasado expulsado por la indignación popular, el apoyo explícito del gobierno aprista a la Sociedad Minera Cerro Verde en las negociaciones de agosto 2006 y mayo 2007 que concluyó con un mínimo aporte minero, la reiteradas equivocaciones reduciendo el presupuesto para la región, la entrega de miles de millones de soles a las regiones del norte y el olvido de la regiones del sur, la suba de los precios de los combustibles y de los artículos de la canasta básica familiar, enardecieron a los arequipeños y a la primera clarinada de paro salieron a las calles el 20 de junio. Al ver el éxito del paro los dirigentes gremiales apuraron la convocatoria a la huelga general indefinida para el 11 de julio con un plataforma muy diversa, la población respondió entendiendo que la rebaja de los precios de los combustibles y del pan era lo que se estaba exigiendo al gobierno central.

Renació el Frente Amplio Cívico de Arequipa (FACA), integrado por la Federación Departamental de Trabajadores de Arequipa (FDTA), por la Asociación de Urbanizaciones Populares de Arequipa (AUPA), por el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Peruana (SUTEP), por el Sindicato de Obreros de Construcción Civil y otros gremios e instituciones. El FACA convocó en junio del 2002 a la huelga contra la privatización de las empresas eléctricas Egasa y Egesur, conocida como la Gesta de Junio, las licitaciones fueron postergadas indefinidamente.

Para algunos dirigentes gremiales conducir una huelga es ganarse el pase a un cargo político en el Estado, pero si bien la población los acepta como conductores de la lucha no vota por ellos en las elecciones presidenciales o regionales y municipales. Otros dirigentes gremiales han hecho de su cargo una carrera que les permite subsistir y obtener privilegios. Por esto es que la población expresa su desconfianza con los dirigentes, porque saben que ponen el pecho por algún interés personal o de grupo.

Alan García al igual que Montesinos aprovechó esta debilidad conceptual y conductual y los puso en evidencia ante la población como dirigentes interesados, pero la enorme desconfianza hacia Alan García malogró la maniobra en el caso de la huelga indefinida de Arequipa iniciada el 11 de julio. La gente paralizó.

García pasó a utilizar otra vieja táctica, infiltrar el movimiento y desbarrancarlo radicalizándolo y dividiéndolo. La Alianza Conservadora cuenta con operadores fujimoristas y apristas en el movimiento de masas para aplicar esta táctica, quienes se encargan de los discursos incendiarios declarando que están dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias. Las torpezas de García, como cuando dijo que las únicas huelgas que el reconoce son las de los irlandeses porque en ellas sí había víctimas fatales, o la promulgación del DS 060 – 2007 que autoriza a las fuerzas armadas a intervenir en el control interno, al amenazar con la militarización y combatir la violencia con violencia inutilizó el accionar de los provocadores. El abuso de poder por García hace caer su aprobación en el surperuano al 8%.


La huelga indefinida de Arequipa se cruzó con la huelga de los profesores y con la anunciada presencia del Primer Ministro Del Castillo para el 17 de junio. La huelga del magisterio con su propia dinámica nacional no está sujeta a la huelga de Arequipa, pero el viernes 13 de julio la columna vertebral de la movilización la constituyó el magisterio con delegaciones de las provincias de la región Arequipa, magisterio soliviantado por la promulgación de la Ley de la Carrera Pública Magisterial el martes 10 de julio, en la cual se permite el despido con tres evaluaciones desaprobadas, evaluaciones parciales pues son sólo exámenes de conocimientos y no integrales del desempeño del profesor.

Paralelamente se abrió un debate en torno a la agenda de la reunión con Del Castillo; por un lado el Gobierno Regional, el alcalde provincial, la cámara de comercio, los colegios profesionales y el FACA por otro. Debate que culminó en la reunión realizada en la Defensoría del Pueblo el sábado 14 de julio, en la que el presidente regional aceptó la agenda propuesta por el FACA a la cual se añadirían algunos puntos más. A pesar de la caída en la contundencia de la huelga el FACA no aceptó levantarla.

El desprestigio del gobierno es tal que la consigna principal de las movilizaciones era la salida de la presidencia de García. Y ese no es un sentimiento de la vanguardia sino del conjunto de la población, los pobres para que entre un gobierno al estilo Evo Morales o Hugo Chávez y los ricos para encumbrar una dictadura militar. Alan García viene perdiendo ante Hugo Chávez y ya esta casi fuera de combate en el surperuano, y la agencia de la Alternativa Boliviarana para las Américas (ALBA) que funciona el la región Puno, con el auspicio del gobierno regional, goza de gran simpatía.

El FACA otorgó una tregua de 48 horas el lunes 16 por la noche para que llegue el premier Del Castillo. Distensión entre el surperuano y el gobierno central. La presencia del pintoresco premier el martes 17 de julio no solucionó las demandas centrales de la huelga.

Perspectivas de la huelga

Iniciada de manera abrupta la huelga indefinida en Arequipa levanta muchas preguntas, y da grandes insumos para analizar el comportamiento político en los próximos años de los partidos en la escena regional.

La primera fecha aprobada por el FACA fue el 23 de julio, a pocos días del mensaje presidencial para evitar el desgaste de una larga huelga. El FACA renace por decisión de los grupos de izquierda y del nacionalismo. El FACA respondió al comunicado antiparo que propaló el gobierno regional con la firma de la cámara de comercio, colegios profesionales, universidades, alcaldes provinciales y distritales. La discriminación a los sectores de izquierda y gremiales de la reunión con Del Castillo, provocó un cruce de palabras injuriosas entre ambos bandos, que no escapó al análisis de apristas y fujimoristas que adoptaron una posición radical para enfrentarlos aún más.

Los radicales aprofujimoristas emplazaron a los dirigentes del FACA para adelantar la fecha de la huelga para el 16 de julio. Las reuniones del FACA cayeron en el asambleísmo, personas sin base comenzaron a llenar el salón de la FDTA y al momento de las votaciones dirigentes y simples transeúntes tenían el mismo peso. Así los radicales controlaron el FACA.

El sábado 7 de julio se realizó la reunión de los dirigentes de los frentes de defensa del surperuano en Arequipa, el acuerdo fue impulsar la jornada de lucha de la CGTP de 11 y 12 de julio, y acorde con la realidad de cada región adoptar otro tipo de medidas. Horas después de terminado el conclave los dirigentes del ala radical del FACA anunciaron que la huelga indefinida se adelantaba para el 11 de julio. Como salio ese acuerdo, nadie lo sabe. El FACA no tuvo otra opción que aceptarla para no ser tratados de traidores. Los medios de comunicación afines a los radicales incentivaron la paralización para el 11 de julio, acusando a algunos dirigentes del FACA de ser dirigentes desgastados y manipuladores.

Metido en un callejón estrecho el FACA en una y otra asamblea quería levantar la huelga, pero en los pueblos jóvenes y en los medios de comunicación lo acorralaban los radicales. La acción de los radicales corresponde a la táctica del caos del gobierno aprista. Empujar al movimiento al límite para que sea rechazado por la propia población que exigirá orden, es decir al abismo del descrédito, para ello no necesitan masa basta con las mil personas que pueden movilizar en una ciudad de un millón de habitantes, que los medios de comunicación levanten las acciones violentas, que el transporte controlado por apristas y fujimoristas pare, y crear un ambiente de terror mediático en la ciudad en lo que era especialista Montesinos y sus operadores.

Como es corriente en estas huelgas sólo para el transporte, el comercio minorista y los servicios educativos pero no la producción industrial y minera ni la agricultura. El 11 de julio la marcha estuvo compuesta por pobladores de los barrios marginales, maestros y pocos obreros de construcción civil.

Para el 12 de julio ya el movimiento decayó, sólo marcharon los maestros y unos cuantos trabajadores de la universidad nacional que están en huelga desde hace un mes. Ese era el día para levantar la huelga, pero los dirigentes del FACA no querían entregarle el movimiento al presidente regional como en la Gesta de Junio del 2002.

Los radicales se montaron el 13 de julio en la marcha del magisterio fortalecida con la participación de delegaciones de las provincias, y forzaron acciones en el Cono Norte de la ciudad; cono controlado por dirigentes que han pasado por la izquierda y han terminado en el fujimontesinismo, han servido a las autoridades apristas locales entre el 2002 y el 2006. Tomaron de rehenes a 7 policías que luego fueron soltados curiosamente sin más trámites.

A estas alturas nadie en el FACA se preocupaba por las propuestas a ser llevadas a la reunión del 17 de julio a la reunión con Del Catillo. El viernes 13 por la noche los radicales hacen vacío a la reunión del FACA para evitar comprometerse con el levantamiento de la huelga y con la aceptación de la invitación del presidente regional a conversar. En la reunión del Comando de Lucha el sábado 14 a las 10:00 a.m. aprueban aceptar conversar con el presidente regional, reunión a la cual asisten los radicales. El diálogo se realiza a partir de las 11:50 a.m. hasta las 3:30 p.m. en las instalaciones de la Defensoría del Pueblo. Asisten el presidente regional y el alcalde provincial y los dirigentes del FACA. Acuerdan unificar las plataformas para la reunión con Del Castillo. Al mismo tiempo que se producía la reunión, los medios de comunicación de los radicales criticaban a los dirigentes del FACA por haber coordinado con las autoridades regional y provincial para la reunión con Del Castillo.

La noche del sábado 14 el balance del Comando de Lucha del FACA entiende que la huelga se basa sólo en los maestros y el transporte y que hay un profundo rechazo al APRA por parte de la población, pero que no hay una respuesta masiva activa en la calle. El FACA recién pule una propuesta a presentar a Del Castillo. A los radicales no les importa la propuesta, tal vez informados que Del Castillo no va a llegar que es el objetivo menor de su radicalidad, darle una justificación a Del Castillo para no tratar los temas de agenda del pueblo de Arequipa.

El domingo 15 los radicales se han dedicado a hacer terrorismo mediático anunciando el Apocalipsis para el lunes 16. Los radicales han tocado las trompetas del juicio final a los traidores a la huelga pero nada contra García.

Por su lado los apristas arequipeños entienden que políticamente están enterrados por un buen tiempo, el gobierno de García improvisado y pegado a los monopolios los ha sepultado. Así que han optado por la táctica de muera Sansón y los filisteos, hundir el barco, total las ratas saben nadar. Los apristas arequipeños se sintieron heridos cuando en la campaña nacional García declaró que sentía vergüenza del ex presidente regional Vera Ballón y del ex alcalde provincial Yamel Romero de su partido, y hoy se la están cobrando. Aunque el blanco principal son el presidente regional y el alcalde provincial de Arequipa.

La huelga ha cumplido con su objetivo de demostrar el profundo rechazo a la política económica del APRA, pero su continuidad va a desgastar este tipo de medidas y justificaría el anuncio del estado de emergencia y de sitio en varias regiones para sofocar los levantamientos populares. También la entrega de una gran parte del presupuesto a Defensa e Interior para seguridad nacional y seguridad ciudadana en vez de emprender los grandes proyectos para el desarrollo del Perú. Y el anuncio de unas cuantas obras sobrevaloradas, para meter mano al tesoro público. Tan infames fines necesitan presentar la imagen de un país en caos.

Por ello la huelga debió ser levantada pero los radicales se han engullido el FACA. Sin embargo el movimiento social no ha sido derrotado y las fuerzas de cambio deben protegerse de la embestida fascista aprofujimontesinista acompasada por Unidad Nacional.


La plataforma de la huelga

La Agenda unificada contiene los siguientes puntos:

1. Reducción del precio de los combustibles
2. Reducción del precio de la harina de trigo
3. Carretera interoceánica
4. Segunda etapa del proyecto Majes – Siguas
5. Presa de Paltiture
6. Ramal sur del gasoducto
7. SOC de inversión regional (100 millones de soles en infraestructura)
8. Transferencia de SEAL al GRA
9. Transferencia de Egasa al GRA
10. Utilización del patio Puno del Ferrocarril en programa de vivienda
11. Descontaminación del río Chili
12. Constitución de una Mesa de Diálogo permanente

La suba de los precios de los combustibles y de la harina

El incremento de los precios de los combustibles hizo explotar paros y protestas en todo el Perú, la suba es de un promedio del 30%. La gasolina de 84 octanos de mayor consumo subió a S/. 12.00 el galón. Como efecto de esta suba los precios del transporte también crecieron, y por efecto dominó el de todos los productos en diferentes porcentajes. El Perú produce más de 100.000 barriles diarios de petróleo pero importa gasolina de la refinería de Repsol de Chile, país que no explota petróleo.

Alicorp que monopoliza el mercado de harinas y grasas aprovechó la suba de los precios de los combustibles y de la harina internacionalmente, para subir el precio por quintal de harina a S/. 76.00. El pan de harina de trigo es el principal producto de consumo de los hogares pobres y la venta a 6 panes por un sol envió por un tubo a la impopularidad al gobierno de García. El dueño de Alicorp, Dionisio Romero, es el principal socio de Roberto Claro, uno de los dos civiles que estuvieron al costado de Pinochet el 11 de septiembre de 1973.

La reunión con Del Castillo

A las 3:00 pm del martes 17 de julio se inició la reunión con Del Castillo. De las siete horas que duró, cinco horas se dedicaron a la reducción de los precios de los combustibles y de la harina. El precio de los combustibles esta compuesto por el precio de la empresa refinadora, más el impuesto selectivo al consumo (como si fueran artículos de lujo), más el impuesto al rodaje (que va a los municipios) y más el impuesto general a las ventas. El precio de la gasolina en el puerto de Matarani, a una hora de Arequipa, cuesta 6 soles, cuando es vendido con todos los impuestos cuesta 12 soles. El 50% del precio es impuestos indirectos o ciegos, porque afectan a ricos y pobres por igual. En vez de centrarse el debate en la reducción de los impuestos, Del Castillo gambetea y centra la discusión en el subsidio a los combustibles, y anuncia que el Fondo de Estabilización ha pasado de 20 millones de soles a 100 millones de soles, con lo cual los subsidios son del orden de 60 centavos de promedio por galón en gasolina y kerosene y de 2 soles en el balón de gas. El subsidio no favorece a los pobres porque se da a las empresas refinadoras, para garantizar sus utilidades. Y el engaño mayor es que ese subsidio ya se dio días antes y, por lo tanto, el precio de los combustibles no bajará.

Ese era el momento de ligar la rebaja de los precios de los combustibles con la reforma fiscal. Como nadie lo hizo Del Castillo se fue de paseo.

Lo mismo sucede con la rebaja del precio de la harina de trigo. Promete dar un dispositivo anulando los aranceles a la harina de trigo. Pero hace pocos días el gobierno rebajó los aranceles a 10% beneficiando al monopolio que la importa, Alicorp, dañando la producción nacional, lo cual ha generado un enfrentamiento entre el gobierno y la Asociación de Productores de Trigo. El arancel 0 para la harina de trigo y el maíz es parte del Tratado de Libre Comercio aún no santiguado en el congreso estadounidense. La alternativa a esa medida era iniciar la reforma alimentaria, es decir hacer más difícil la importación de harinas que no se producen en el país y cambiar los hábitos de consumo, sustituyendo el trigo por kiwicha, quinua y otros productos andinos. Lastimosamente el nacionalismo es una etiqueta de los dirigentes pero no una propuesta concreta. Del Castillo nuevamente ganó la partida.

Agotados por los debates sonaron frases sueltas que pedían la revisión de los contratos con REPSOL, RELAPASA, que refinan el petróleo peruano y son las principales distribuidoras de combustibles en el mercado peruano.

Sobre el gaseoducto Del Castillo lacónicamente dijo que el gas era para los peruanos y no hubo más discusión, cuando se conoce que el gobierno aprista esta apañando al Consorcio Camisea, constituido por Hunt Oil, Techint y otras transnacionales, para vender el gas a Estados Unidos, México y Chile. El país sureño ya tiene una planta de fragmentación en Tocopilla. La huelga no ha tocado el tema del gas, cuando es lo más importante para el futuro del surperuano, pues significa el cambio de la matriz energética y base de la industria petroquímica.

Ni en el Gobierno Regional, ni en los municipios ni en el FACA hay una propuesta para el desarrollo del surperuano. Por eso el gobierno aprista que esta construyendo el tercer piso del fujimorismo, del neoliberalismo, va regalar sin una oposición seria los recursos naturales del Perú.

Convocatoria a una Asamblea Constituyente

Las protestas sociales le están escribiendo el discurso del 28 de julio al presidente Alan García Pérez, que debe presentarse ante el Congreso con el balance en rojo de su primer año de gestión y la incertidumbre para el siguiente año; previniéndose la continuidad de su mandato en un ambiente de intranquilidad, pues las huelgas y los paros, la música de la democracia que a García lo enloquece, seguirán y por su formación apelará al autoritarismo y finalmente a la negación de la democracia, la dictadura. La más usada forma de gobierno en el Perú, que de sus 186 años sólo ha vivido 54 años en democracia.

Atentas están las fuerzas armadas, en cuyo seno superviven la mentalidad y los militares formados por la mafia fujimontesinista (el Contralmirante ® Luis Giampietri de casta fujimontesinista que ocupa la segunda vicepresidencia alista la banda presidencial). Por lo pronto han conseguido que con el susto de los últimos días que sufrió Alan García con la marejada de paralizaciones, firme el DS 060 – 2007 que faculta a los militares para intervenir en el control del orden interno, potestad que era exclusiva de la policía.

García no se diferencia de Fujimori, Paniagua y Toledo en doctrina económica. Si Fujimori construyó el primer piso, Toledo el segundo, García está poniendo el tercer piso del modelo neoliberal, en contra de la voluntad de la mayoría de peruanos que en junio del 2006 votaron por el cambio del modelo económico.

Fujimori retaceo el tejido productivo, social y político, atomizó la sociedad peruana, y el sálvese quien pueda es la conducta general de estos tiempos. Pero los pocos grupos reducidos de idealistas que quedaron, sin embargo, lograron reconstruir un mínimo de institucionalidad gremial y municipal y, principalmente, los gobiernos regionales elegidos por voto popular. Esta organización social descentralizada es la que pone en jaque al APRA, que degeneró con García, Mantilla y Cabanillas en una suerte de maquinaria electoral con un comportamiento mafioso. Al interior del APRA surgió una oposición a esta conversión antidemocrática exigiendo la vuelta a la Constitución de 1979, que el Comité Ejecutivo Nacional la semana pasada puso fuera del partido destituyendo al Secretario de Organización, Wilber Bendezú, que la encabezaba.

Con el APRA en el gobierno el regreso al pasado constitucional se frustró al ser insuficiente la Constitución del 79 para canalizar las demandas populares; el Perú necesita una nueva Constitución que recorte el poder de los monopolios, sea el marco legal para el impulso económico, garantice los recursos naturales como propiedad del Estado y de las comunidades en las que se encuentran, establezca diversos tipos de asociatividad para producir, siendo una la empresa privada pero en igualdad con las comunales, cooperativas, etc.; armonice la relación entre la humanidad y la naturaleza; cimentando el desarrollo soberano y libre de los peruanos.

Antes de deslizarse por el tobogán del caos, al cual el APRA (en alianza con el fujimontesinismo, Unidad Nacional, el Opus Dei y los pastores conservadores evangélicos) está empujando conscientemente al Perú, es posible hacer fracasar al autoritarismo en sus planes de instaurar una dictadura, convocando a una Asamblea Constituyente que sea la expresión política de los movimientos sociales descentralistas locales y regionales; y de los gremiales que están tomando las calles para cambiar el rumbo del Perú.

La alianza conservadora liderada por el APRA que gobierna el Perú creando el caos quiere hacer realidad el sueño de los monopolios pinochetistas chilenos, de las transnacionales y de los empresarios socios de ellos, de embolsicarse los miles de millones de dólares que genera la extracción de materias primas, fundamentalmente minerales e hidrocarburos.

En el Perú existe una fuerza ideológica condensada en Juan Pablo Viscardo y Guzmán, en Tupac Amaru II, en José de San Martín y Simón Bolívar, en el General Santa Cruz, en José Carlos Maríategui, en los ideólogos y políticos de los años sesentas y setentas del siglo XX, en los nuevos jóvenes ideólogos del siglo XXI. Esta fuerza ideológica necesita traducirse en fuerza política para dar orientación a la protesta social, que sin objetivos políticos termina justificando el caos conservador encubridor de la rapiña de mercantilistas y neoliberales.

El surperuano esperanza del Perú

El gobierno aprista representa a las transnacionales y monopolios pinochetistas, al Opus Dei que tiene dos ministros, a los empresarios mercantilistas, a los militares corruptos y genocidas, a los evangélicos conservadores, a los fujimontesinistas; es decir, a todos los que quieren la desaparición del Perú; a aquellas oscuras fuerzas que son las responsables de la inviabilidad del Perú como nación.

Es el surperuano que esta naciendo un movimiento social que aún no se traduce claramente en una propuesta política. La audacia es una de sus características. Por ello el gobierno aprista y sus mentores están empeñados en hacerlo abortar, liquidando incluso a figuras moderadas como el presidente regional de Arequipa, o combatiendo directamente al presidente regional de Puno.

Un país en llamas

El Perú vive los tiempos del Apocalipsis, las bóvedas del Banco Central de Reserva repletas de oro y dólares y en las aldeas y ciudades la gente muere de hambre. El jinete Alan García cabalga dejando a su paso corrupción, promesas incumplidas, desesperanza.

Loreto, Ucayali, Andahuaylas, Arequipa, Puno, Ayaviri, Tacna, Ica, Chiclayo, Lima, Cajamarca ciudades remecidas por protestas sociales de gran envergadura, sólo en Loreto marchaban 50 mil personas exigiendo mantener las exoneraciones tributarias a la selva. Puno pedía la iniciación de la construcción del ramal 5 de la carretera Interoceánica. Arequipa la rebaja del precio del pan y de los combustibles. Andahuaylas con 30 mil campesinos en las calles apoyo al agro. Ayaviri la paralización de la explotación minera por contaminar el agua de los ríos y bofedales.

La huelga del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación del Perú – SUTEP -, a medio acabar, por la gratuidad de la enseñanza, la estabilidad laboral de los maestros y la mejora de la calidad de la educación. De los trabajadores administrativos de sector educación –FENTASE –, por mejora de sueldos. Los mineros de Casapalca por la reapertura de la mina y la libre sindicalización.

Desquiciados por el pánico los empresarios de la CONFIEP exigen mano dura contra los atrevidos pobres, en una conferencia de prensa a la cual asistieron todos los sectores.

Los militares esperan el momento oportuno para dar el golpe de Estado y acabar con las protestas. Además están cansados de los continuos escándalos en que están envueltos, por el comportamiento sistemático de utilizar el presupuesto de Defensa para enriquecer a los altos mandos. Es necesario poner un gobierno como el de Fujimori que amordace a la prensa y no salgan a luz pública los robos de los generales.

La protestas sociales y la represión estatal sin propuestas de las poblaciones en conflicto ni alternativas por parte del gobierno aprista, agravaron la crisis social y política crónica del país; que se precipitará en una represión indiscriminada en preparación por Alan García y las fuerzas armadas o la convocatoria a una Asamblea Constituyente exigida por los movimientos sociales.

Las montoneras de Piérola

Nicolás de Piérola Villena durante el gobierno de José Balta Montero (1868 – 1872) comando el descontento de las provincias sureñas, olvidadas por el centralismo limeño. Así lo presenta la historia oficial. Piérola formó grupos de montoneros para combatir al gobierno de Balta, que había iniciado la construcción de los ferrocarriles del centro y del sur, pero algunos indicios indican que lo hizo con dinero proveniente del sur. Chile siempre ha obstaculizado el desarrollo del Perú (disolvió la Confederación Perú - Boliviana enviando un ejército al mando de Ramón Castilla en 1836).

Cada vez que el Perú tiene la oportunidad de despegar Chile se encarga de financiar fuerzas que desestabilizan al país, o de poner presidentes que le son fieles (el golpe de Estado contra el General Juan Velasco Alvarado lo da Francisco Morales Bermúdez en la ciudad fronteriza con Chile, Tacna), o ambas cosas. Al parecer estamos ante esta situación, donde el gobierno central, algunos dirigentes sociales, grandes empresarios y medios de comunicación responden a los dictados de los monopolios pinochetistas afincados en Santiago.

Onganía y García: Tiempo económico, tiempo social y tiempo político

El 28 de junio de 1966 el general en retiro Juan Carlos Onganía comandó el golpe de Estado contra el presidente Arturo Illia en la Argentina. Onganía decía que el gobernante debe priorizar el tiempo económico, sobre el tiempo social dejando para después el tiempo político. El tiempo económico lo utilizó para aplicar un plan económico liberal, antiestatista y de liberación del mercado. La relación de sus medidas comienza por la suspensión de los convenios colectivos, la inclusión de la empresa privada en el negocio de los hidrocarburos, la ley de alquileres para permitir los desalojos, la eliminación de los subsidios a las regiones, inversiones estatales en grandes obras públicas, devaluación del peso argentino en 40% y congelamiento de los salarios, prohibición de las actividades comunistas, clausura de medios de comunicación.

En 1966 los estudiantes universitarios se sublevaron contra el gobierno militar de Onganía, luego reprimidos violentamente el 29 de julio acción conocida como la Noche de los Bastones Largos. La huelga portuaria se inició a fines del mismo año. El PBI crecía al ritmo del 5%, la inflación era menor del 10%, la balanza de pagos era 200 millones superavitaria, inició la construcción de la central atómica de Atucha; pero la economía sólo favorecía a los ricos. Onganía no hizo caso de los movimientos sociales pues creía firmemente en su fórmula de los tiempos.

Onganía olvidó la enseñanza de Nicolás Maquiavelo: todos los Estados bien gobernados y todos los príncipes inteligentes han tenido cuidado de no reducir a la nobleza a la desesperación, ni al pueblo al descontento. El 5 de mayo de 1969 es asesinado un estudiante en Corrientes y las acciones de masas arden por toda la Argentina, el 29 de mayo la ciudad de Córdoba es invadida por los obreros que toman las empresas extranjeras. El Cordobazo obliga a dimitir al gabinete y la ruptura de la paz social es profunda, el gobierno de Onganía esta devaluado a pesar de los logros económicos.

El 8 de julio de 1970 el general Roberto Livingston comanda el golpe de Estado contra Onganía.

La fórmula de los tiempos no le sirvió a Onganía para gobernar exitosamente, sin embargo, García cae en el mismo error. Las frases comunes son que hay que crecer primero para luego distribuir, que los comunistas son los que provocan las protestas populares. Otro error común a ambos es la militarización de la sociedad, acompañada de la judicialización de los movimientos sociales.

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